Varias actividades de protección medioambiental son el centro del programa 'GreenFuture', que incluye objetivos cuantificables
o La estrategia apunta a la conservación de recursos en la producción y a los vehículos de bajo consumo
Los ambiciosos objetivos medioambientales para 2018 se intensifican: mejoras en materia de consumo de energía y agua, emisiones de CO2, residuos y en los llamados compuestos orgánicos volátiles
Producción responsable y sostenible, así como vehículos eficientes en consumo: estos son los elementos esenciales de la estrategia medioambiental 'GreenFuture' de ŠKODA. Hasta ahora, el objetivo se había centrado en reducir en un 25% el impacto medioambiental de la producción, a partir de la medición de cifras clave entre 2010 y 2018. Este año, el fabricante ha incrementado este objetivo de reducción hasta el 45%. Esto significa que, en ocho años, el impacto medioambiental prácticamente habrá disminuido a la mitad. Para celebrar el Día Mundial del Medio Ambiente, el pasado 5 de junio, el fabricante presentó varias iniciativas destacadas.
El objetivo principal de la estrategia ‘GreenFuture’ de ŠKODA es mejorar todavía más la sostenibilidad de la compañía», explicó Michael Oeljeklaus, responsable de Producción y Logística del Comité Ejecutivo de ŠKODA. «En los últimos años, la hemos implementado exitosamente con el foco puesto en los vehículos eficientes y el uso económico de los recursos en todas las áreas de negocio. Durante los próximos años, seguiremos implementando meticulosamente nuestra estrategia medioambiental. Para una mayor reducción del consumo de energía en la producción, estamos usando la tecnología más moderna con la mayor eficiencia energética posible», añadió Oeljeklaus.
ŠKODA está integrando todas las actividades medioambientales bajo el paraguas de la estrategia ‘Greenfuture’. ‘Greenfactory’ engloba todas las actividades que conservan los recursos en la mayor medida posible durante la producción.
Indicadores clave como el consumo de energía y agua, la cantidad de residuos producidos en la fabricación de cada vehículo, las emisiones CO2 y los llamados compuestos orgánicos volátiles (VOC) -como los generados en el pintado de la carrocería de los coches- son medidos con exactitud y posteriormente optimizados. Según estos indicadores, ŠKODA ya ha reducido su impacto medioambiental en un 35,8% de media entre 2010 y 2015. Para acelerar esta tendencia positiva, la compañía ha establecido objetivos todavía más ambiciosos para este año. Según ello, ŠKODA reducirá el impacto medioambiental de su producción en un 45% en 2018, por lo que casi supondrá la mitad de los niveles de 2010.
Concretamente, el consumo de energía en la producción disminuirá un 30% durante este período. El objetivo es disminuir en un 55% las emisiones de CO2 por vehículo producido. Por otra parte, en 2018 la reducción será del 70% en la cantidad de residuos por vehículo, del 25% en el consumo de agua y del 45% en las emisiones VOC. Los objetivos de mejora, que han sido aumentados hasta el 45%, serán el resultado de medidas específicas, entre las cuales la regulación del sistema de ventilación, la instalación de una iluminación con ahorro de energía y la reducción de residuos creados en la producción de cada vehículo.
Medidas en todo el negocio
El paquete de medidas a aplicar se extenderá a todas las áreas de la compañía. Por ejemplo, cerca de una cuarta parte de toda la energía necesaria en una fábrica se usa en el aire condicionado para las salas de producción, y es por ello que este aspecto es una absoluta prioridad en el programa ‘GreenFuture’ de ŠKODA. Gracias a la nueva unidad de control del sistema de ventilación, la compañía ahorra 3.500 MWh por año, lo que equivale al consumo energético de 875 hogares. Los nuevos compresores en las plantas de prensado, que operan a una menor presión de aire, alcanzan un ahorro de energía de 1.600 MWh.
Solo en la planta de Kvasiny, la nueva iluminación de las nave supondrá una reducción de 1.500 MWh al año. En varias naves, dónde los vehículos acabados esperan hasta su entrega, ŠKODA también instaló fuentes ahorradoras de iluminación, recortando así el consumo de energía a la mitad. Gracias a sistemas inteligentes de apagado automático, la luz también se desconecta sola cuando las operaciones terminan en las naves.
En 2014, la cantidad de residuos por coche fabricado ya disminuyó de 16,8 kg a 15,1 kg en un año. En 2016, ŠKODA reducirá el volumen de residuos dipositados de sus propias plantas de producción en un total de 4.000 toneladas, lo que representa una reducción de más del 50% de los residuos por vehículo en solo dos años, sitúandose en 7,8 kg. Además, los residuos ya no se almacenan, sino que se separan para el reciclaje de la energía. Una de las mejoras incluye la filtración y reutilización de los aceites usados en el proceso de producción, lo que ahorra recursos y reduce la cantidad de residuos.
Uno de los pilares de la producción sostenible es el proveedor de energía ŠKO-ENERGO, en el que ŠKODA AUTO a.s. tiene una participación del 46%. Desde el inicio de la colaboración, en 1995, ambas compañías fueron capaces de reducir a más de la mitad el consumo de energía por vehículo producido. Con 1,5 millones de metros cúbicos, el actual consumo anual de agua está al nivel de 2010, pero teniendo en cuenta el aumento de la producción de vehículos, el consumo de agua por vehículo se ha reducido cerca de un 30%
El incremento del uso de biomasa para la energía eléctrica en el generador combinado de calor y electricidad (CHP) de ŠKO-ENERGO proporciona un ahorro de hasta 130.000 toneladas de emisiones de CO2 por año, en comparación con la combustión de carbón y gas. Gracias a este modo avanzado de suministro de energía, la huella de carbón por vehículo producido también mejoró un 46% entre 2010 y 2015.
ŠKODA apoya la política ambiental de República Checa mediante el proyecto ‘Un coche, un árbol’. Entre 2007 y 2015, el fabricante de coches plantó más de medio millón de árboles en más de 50 localizaciones. Muchos trabajadores de ŠKODA se ofrecen voluntarios para plantar árboles, contribuyendo a la preservación de la biodiversidad y a la protección del medio ambiente.
El Día Mundial del Medio Ambiente, una institución global
Para conmemorar el inicio de la Conferencia de la ONU sobre el Medio Ambiente, el 5 de junio de 1972 en Estocolmo, las Naciones Unidas declararon el 5 de junio ‘Día Mundial del Medio Ambiente’. Cerca de 150 países en todo el mundo participan en esta jornada, que apuesta por reforzar la conciencia medioambiental y los valores ecológicos. El eslogan para el ‘Día Mundial del Medio Ambiente’ de este año ha sido ‘Lucha por la vida salvaje’.